Arco Iris
Arco Iris es multicolor y aterciopelado :tan liso que podria hacerse pasar por una esponja.Solo las tijeras negras de su pico son amenazadoras como dos espadas de diamante puro.
Juegos de niños
Al caer la tarde, Arco Iris y yo contemplamos a los niños consentidos jugando en la plazoleta del ''Cabezolón'', a las ''canicas'' con sus bolas de cristal multicolor, o sacando los dedos para ''bola''
y el que se queda se la ''moga''. Sus madres le han preparado un bocadillo de jamón untado en aceite de la cooperativa, que como estan hartos lo tiran a la papelera porque no les apetece.
-Mi padre tiene un Audi A-4
-Y el mío un mercedes
- Y el mío un descapotable
-Pues mi madre se ha comprado un collar de perlas finas.
Collar de perlas, que cuesta meses de trabajo en un tejar.
Audi A-4 que llega a los doscientos por hora para que los del destacamento de tráfico puedan multarle y quitarle puntos del "carné". Entre tanto ruido Rosa, sobrina de Bernabé "Garbanso", juega con sus amiguillas:
un, dos, tres, pollito inglés.
Jugad, cantad, niños, antes de que el fantasma "Crisipelao" os atrape.
Vamos, Arco Iris.
Xoxolate
Enfundada en mis pantalones vaqueros con la pierna pintada de flores rosas y blancas y mi pelo recogido con un coletero "morao" llevo a Arco Iris en su jaulita de color verde esmeralda y barrotes de oro a tomar solecito de la tarde a las eras, junto a los pisos verdes
de hierba. Parecemos dos aventureros en busca de un tesoro . Los niños de los pisos colocan sus tablones encima de grandes piedras por las que hacen peligrosos saltos con sus bicicletas, compitiendo para ver quien
sube más alto.
Se escuchan de pronto chillidos:
¿Xoxolate! ¡ Xoxolate! ¡ Xoxolate !
Delante, las eras, soleadas, en el horizonte en calma. La casita blanca con su limonero y junto al sendero las chumbreras pinchosas.
Y allá, cada vez más lejos:
¡ Xoxolate! ¡ Xoxolate!
El alambre suelto
Camino de Burguillos arriba. Arco Iris ha empezado a dejar en el suelo de la jaula finísimas lágrimas de rubí. Me he parado a ver lo que pasa. Arco Iris me enseña su ala dolorida con sus plumas húmedas y enrojecidas, casi sin aliento para levantarla.
Con un trocito de esparadrapo y un poco de Betadine untado en algodón le curo su pequeña raja, por donde mana el rojo líquido de vida. Se había enganchado con un alambre de asesino suelto de su castillo dorado. Todavía sin fuerzas y "emberrinchao", he puesto su fortaleza un poco al sol, sobre un pequeño padrón.
Después hemos continuado viaje hacia el verde mar de olivos.
La terrazaArco Iris no has ido nunca a una terraza, no has sentido nunca la suave brisa que recorre nuestra alma. Arco Iris, si pudieras ver la nieve que en la terraza ha caído tu sonrisa sería aún más bonita. No has apreciado estas grandiosas vistas y el manto de franela que la cubre. Al bajar por las escaleras sombrías de madera pulida, siento que tú recibes el sol que acaricia tu cuerpo. Si pudieras subir esas escaleras tus patas te lo agradecerían. Si pudieras ver lo bonito que es el paisaje tus ojos llorarían.Escucharías desde allí el susurro de los alegres pajarillos. Escucharías el sonar de las campanas, y cómo tu corazón se altera lleno de emoción. Tu serías feliz porque estar allí es vivir.
( Rosa Mari y Javier )
El aceite
Te cuento, Arco Iris que el espirítu de Bailén es el barro.¿Tu, crees? No, el espirítu de Bailén es el aceite.Bailén es como una enorme garrafa de aceite de oliva,verde de hojas por dentro,y cristalino por fuera.
De mañana, con el frío acompañandoles , salen los tractores, con sus remolques repletos hasta los topes con los aceituneros, a los olivares.Toman por las veredas una serpenteante y escurridiza cola, cargada de varas,vibradoras,mantos, y "limpias".
El aceite pega con todo, con una tostada, con el jamón, con el tomate, en la ensalada, en los gazpachos, y tambien con un pan y aceite con azúcar o sal.
El tío de la vara.
De repente, como una centella, se escucha un ruido continuo, como el de un taladro gigante que agujerea la tierra. Luego una voz grave y poderosa : “ Poder de la varaa “ . Se oye el estruendo de un rayo y una luz roja se posa sobre la vara y le da poder : Los niños gritan: ¡ tío de la... vara! ¡ tío de la vara!
Se lanza vertiginosamente en una carrera por quitar todas las “ tonterías del mundo”. Un niño maleducado, caprichoso y consentido ha estado rompiendo el material de otros niños y no contento con eso les pegaba tortas y “ galletones”. Nuestro héroe ha escuchado su llamada y responde .: ¡ “sus”voy a crujir vivos!
Golpea el aire su varita mágica y el niño maleducado ve la vida con otras perspectivas, con otro color. Un mundo nuevo se abre para él.
Arco Iris, hay que darle las gracias por su trabajo duro pero educador a la vez. Estamos en deuda con el tío de la vara por haberle quitado las tonterías a ese niño maleducado, que hoy ha visto la luz de la vara y que le ha abierto por completo los ojos.
Los toros
Arco Iris, los toros no son ni arte, ni cultura. Es violencia y los toreros matan por dinero y además ponen en peligro su propia vida. Si embargo la gente disfruta viendo esta horrorosa profesión. Sangra la espalda del toro al igual que sangra el hombro del torero. Las banderillas se menean cuando el toro cae herido. Vamos Arco Iris, no quiero ver como va a acabar.
Miguel Ángel Álvarez Martínez
Terremoto
El miedo se agudiza, pánico en las casas, suspiros de impaciencia, el terible aire ya está en marcha. El terremoto anuncia su llegada,viene del oriente ¡ La tierra tiembla! Cabrera.
El suelo tiembla, la gente, asustada, grita.El terremoto, infinito y enorme, como un chillido que no acaba nunca ( María Dolores). El terremoto acaba y se tranquiliza
Pánico, ruido inesperado, terror en los habitantes. Nadie puede salir de ese infierno. Todo se calla. El tiempo desaparece en la penumbra. Los habitantes sorprendidos por el terremoto que llega a la luz de la luna. Este terremoto que parece no se va a acabar nunca. ( Javi )
El loro
Un día de verano caluroso, ardiente y soleado, iba paseando por la calle con Arco Iris, cuando un loro amarillo y negro se me posó en la mano con máxima seguridad.
Lo llevé al veterinario y me dijeron que era un loro francés. Después fuimos a mi casa y le limpiamos el pico y las patas, que eran de color naranja como las mandarinas. Fuimos a comprarle pipas y cacahuetes. Todos los días jugabamos a enseñarle palabras nuevas y lo mimábamos. A veces me lo encuentro posado en el espaldar de la silla. Otras veces vuela por el patio, al aire libre y de vez en cuando se posa en mi hombro para descansar. Al principio Arco Iris se asustaba pero luego se hicieron buenos amigos.
Miguel Ángel, Manzano y Javier.
La ardilla
Un día de campo, íbamos mi hermano y yo paseando por un sendero. Alli, en lo alto de un árbol se sintió un ruido. Fuimos a ver que era:
-Raúl has visto eso.
-Si,Daniel,si.
Pero cuando fuimos a mirar lya no estaba.Parecía que era un truco de mágia.La ardilla era marrón con dos rayas negras en el centro.Era muy lista,porque fuimos a cogerla y se esperó. Mientras que nosotros llegabamos, ella pensaba y cuando llegamos se nos pasó por debajo de la ccintura.
Corrimos y corrimos pero no la atrapábamos. Así que ideamos un plan.Ese plan era que uno se iba por un lado y otro por el otro lado. La atrapamos y le pusimos Micky.La cuidamos como si fuera nuestro hermano menor y creció hasta que se puso enorme.Cuando se puso enorme la devolvimos al campo donde creció y volvió a ver a sus padres y a su pequeña hermana y asi vivieron felices y no los molestaron más gente. Arco Iris y yo ibamos al campo para verla con las demás ardillas, pero casi nunca lo conseguimos.
Raúl Merlo.
Arco Iris y yo estabamos dando un paseo en la tarde de calor intenso. Nos encontramos a un hamster. Al principio no sabiamos de qué animal se trataba.
Cogimos al hamster y seguimos andando hasta que nos encontramos a un hombre y le preguntamos que si sabía de que especie era el era. El hombre nos dijo que sí, que era un hamster romano . ¿ que hacía aqui un hamster romano?. Los niños le hicieron juegos .Le pusieron en la rueda de los hamster noche y dia para ver si se cansaba .Lo que no entendíamos Arco Iris y yo es que no lo encomtrasemos debajo de un árbol. A ese hamster le gustaba mucho el agua. Comprendimos por qué le gustaba hacer todas esas cosas. Era un hamster juguetón.
María Dolores."El perro jabalinero"
Lo divisamos mi amigo y yo regresando, una tarde, de la escuela por el callejón. Era en Marzo - aquel cielo azul celestial, casi blanco, Arco Iris.-
Llegamos a la granja y nos encontramos con un perro indefenso y chillamos sin cesar:
-¡Un perro, un perro!
Luego lo bañamos porque venia muy sucio.
Don Jose Antonio, Canario Amarillo y otros que escucharon a éstos, nos comentaron que este perro era un perro jabalinero.
Y algunos de los niños que lo encontraron le hacian numerosas "trastadas" como:
-Hacerle bailar, montarse encima suya, etc...
Pasaban los dias sin aparecer el perro. Una mañana, en un abrir y cerrar de ojos, aparece en el suelo verde esmeralda, inmóvil, como una estatua.
Javier Merino Chica
Oro liquido, olor a Bailén, como la pureza del agua. Los aceituneros se levantan temprano con la salida de sol que hace resplandecer las aceitunas como si fueran esmeraldas. Su aroma es la fragancia de Bailén, su sabor es la satisfacción de los bailenenses, y su líquido la sangre de tales.
Por el estrecho camino,
va el pobre aceitunero,
con su carga de valiosas aceitunas.
Así es su vida cotidiana, día tras día, trabajando de sol a sol.
Cabrera y Alejandro
"Arco Iris mi mejor amigo"
¿Arco Iris, me ves?
Estoy aquí,dondé siempre nos sentabamos para ver el cielo estrellado.¿Amigo, por qué te fuiste?. Hubiéramos hecho más cosas y más aventuras. Eras el mejor amigo del mundo. Soló tengo una bonita pluma tuya para recordarte.Allí en el Reino del Cielo acostado y silencioso estarás.
¿Arco Iris,me ves?
Estoy aquí, en el río donde nos sentabamos para mojarnos los pies.Fuiste un amigo de verdad.Te recordaré en lo más profundo de mi alma, Arco Iris. Esperó qué estes volando con los tuyos allí arriba. ¿Por qué te fuiste amigo?. Siempre serás mi amigo y siempre te recordaré. Estaré esperándote, aquí,en la colina, viendo el atardecer.
Miguel de Manuel Lorenzo
